Cuando tenía 8 años tuve mi primer trabajo no un puesto de limonada o un puesto como vendedor de periódicos sino una empresa que me convirtió en un empresario, un luchador por la justicia, y sí, un criminal. Creciendo en Colombia en una época en la que el gobierno protegía ferozmente las industrias nacionales, las importaciones estaban prohibidas.
Esto significaba que mientras los niños estadounidenses jugaban con sus Barbies y comían coloridos dulces, Yo jugaba con mis dos juguetes tristes, José y Camila, y dulces locales insípidos. Pero mi papá, siempre ingenioso, decidió cambiar eso. No cambiamos la ley, la rompimos. Bienvenidos a Spanish Colombiano. Soy Jorge Castellanos, tu amigo colombiano. y estoy aquí para ayudarte a aprender español de Colombia de una manera natural y orgánica
mientras conoces nuestra cultura. He tenido el privilegio de ayudar a miles de personas a mejorar su español y a conectar con Colombia de una manera auténtica. Con más de medio millón de descargas, estamos entre el 5% de los podcasts más populares en el mundo. No te pierdas la oportunidad de unirte a nuestros oyentes y descubrir por qué Spanish Colombiano es el favorito para aprender español y conectar con la cultura colombiana.
En el episodio de hoy te voy a contar acerca de mi emocionante negocio de infancia. donde el contrabando de dulces americanos se convirtió en un imperio clandestino de tres años. Todo por la emoción del peligro y el sabor de la dulce rebelión.
Antes de comenzar quiero recordarles que la transcripción y la traducción en inglés de este episodio está disponible en el enlace de la descripción o simplemente vayan a www.spanishcolombiano.com como es www.spanishcolombiano.com Ahora sí, empecemos con la historia.
cuando tenía 8 años conseguí mi primer trabajo a pesar de mi corta edad ya me había convertido en un empresario un luchador por la justicia y un criminal Crecía en Colombia en una época en la que el gobierno protegía mucho la industria nacional, por lo que no se permitían importaciones. Y para un niño de segundo grado eso significaba que los juguetes y los dulces se producían localmente.
así que mientras los niños estadounidenses crecian con barbie siendo veterinaria o astronauta Dirigiendo una ladera y teniendo una casa en la playa de Malibú. Yo tenía a mis juguetes José y a Camila. ¡Que sí! eran más étnicamente correctos venían en un set con dos hijos Camila no tenía aspiraciones y tampoco tenía sentido de la moda Con un extraño vestido de cuello a tobillo y con moña en el pelo, era una ama de casa que no iba a ningún lado. Los dulces también eran un problema.
Porque bueno, los niños en Estados Unidos comían ese chicle que parecía una cinta larga con formas y sabores. Nosotros Teníamos chicles cuadrados blancos de menta y canela. Ni siquiera hierbabuena. No, solo menta. canela y unas gomitas de naranja de sólo sabor naranja no había variedad para nada Yo era de clase media, lo que significaba que mis padres tenían el dinero para la escuela cara. pero no el dinero en ese momento para vacaciones fuera del país.
En el colegio mis compañeros venían de Estados Unidos con todas estas cosas geniales y yo estaba con mi gomita de naranja maldiciendo al mundo. Le pregunté a mi madre, ¿por qué estaba ocurriendo esta injusticia? ella me explicó muy amorosamente sabes es la ley y sabes que es ilegal comprar y vender importaciones No hay nada que podamos hacer. Yo estaba irritado, con ganas de llorar, indignado por esta injusticia. y mi papá un tipo observador malicioso y echado para adelante dijo mijo
Me gusta su actitud. Me gusta. Me gusta lo que veo. Le voy a conseguir dulces americanos. A mí en ese momento se me iluminaron los ojos. Yo estaba emocionado y lleno de esperanza. Pa, ¿vas a cambiar la ley? Y él dijo, no mijo, la vamos a romper. Sí, mi papá es increíble. Así que nos fuimos al carro y fuimos a donde estaban los contrabandistas a San Andresito. Un extraño centro comercial donde contrabandeaban de todo. Juguetes, dulces, trago y mucho más.
Cuando llegamos al centro comercial yo estaba muy emocionado. Me sentía grande porque a pesar de tener 8 años ya iba a romper la ley. Así que mi papá sacó del bolsillo 20 mil pesos, el equivalente a unos 5 dólares, y me dijo, vaya y compré algunos dulces, mijo. Yo lo miré y le dije, no pa, dame 50. Y él dijo, no seas codicioso. Yo le dije, No, es que voy a comprar estos dulces para mí y otros para revender en el colegio.
así que mi papá dijo bueno si es para eso te voy a prestar los 50 y los vas a devolver yo le dije si papá no hay problema Tomé mis dulces, los llevé a la escuela y se vendieron en segundos como pan caliente. Los dulces eran buenos obviamente, pero también por esa sensación de romper las reglas. Ustedes saben, estos dulces eran ilegales antes que nada. Y también el hecho de estar en una escuela muy católica donde masticar chicle y vender cosas era prohibido y podría hacernos expulsar.
incrementaba la sensación de peligro lo cual atraía más clientes Mi negocio prosperó, prosperó durante tres años gracias a Dios, hasta que el gobierno cambió y abrió la economía a las importaciones. yo ya tenía 11 años así que lo entendía Pero me había acostumbrado a cierto estilo de vida. Así que no me gustó. Estaba preocupado de perder mis clientes. Hablé con mi papá y él me dijo, tienes que aprovechar esto, vende tantos dulces como puedas mientras aún puedas hacerlo. Y eso fue lo que hice.
¿Y saben qué fue lo más interesante? Después de que el gobierno abrió la economía y cualquier persona podía comprar legalmente los dulces importados en cualquier tienda o supermercado. Los niños del colegio seguían comprándome los dulces a mí. ¿Por qué? Evasión de impuestos. Mis dulces eran más baratos porque mi gente no estaba pagando impuestos. Así que no se trataba tanto de lo que vendas o lo que des a la gente, sino de cómo lo haces. ¿Sí o qué?
Estos niños estaban tan emocionados de hacer cosas ilegales que no les importaba que fuera más fácil para ellos conseguir el dinero de sus padres y comprar los dulces legalmente. No les importaba tener que arriesgarse a ser expulsados de la escuela. Para ellos el hacer cosas prohibidas daba un toque de desobediencia e importancia en sus vidas. Muchachos un favor muy importante les quiero pedir.
sigan el podcast y déjenme 5 estrellas yo sé que están ocupados manejando o de pronto lavando los platos Pero yo sé que ustedes son buena gente y van a parar por 30 segundos lo que están haciendo y me van a dar 5 estrellas al pot.
O si están manejando, apenas parquen, opriman esas cinco estrellas para yo mantenerme motivadito y seguirles trayendo más episodios chim... antes de irnos quiero dejarlos con esto A veces la verdadera motivación por hacer algo no es el resultado, sino el desafío y la emoción de conseguirlo. La sensación de aventura y el sentido de comunidad que creamos en el proceso puede ser más valioso que el mismo objeto que perseguimos.
De la misma manera, aprender español es un viaje lleno de desafíos y reconvenzas. aprovechen cada oportunidad para practicar de manera honesta y auténtica y encontrarán que no sólo estarán aprendiendo un idioma sino también desarrollando una habilidad que les abrirá puertas y los conectará con más personas de forma genuina. sigan practicando y nos vemos en el próximo Se cuidan, chao.