Hola, qué tal amigos de Rock and Gold. Estamos en un episodio más de su podcast favorito y como siempre me acompaña Víctor. ¿Cómo estás? Bien, muy bien. Tú cómo has estado? Buenos días a todos. Buenos días, buenas tardes, buenas noches. A la hora que ustedes puedan y tengan oportunidad de escuchar sus podcast favoritos. Nosotros estamos encantados de acompañarlos y pues muy contentos aquí en nuestra casa, el Colegio de Imagen Pública, por qué no decirlo. Está bien, ya la anunció.
Qué bueno que le estamos, qué bueno que Pam se esté encargando de las menciones. Con eso que ya la trae, ya trae la experiencia. Estuvo perfecta la mención, Pam. Muchas gracias. Pero independientemente de dónde estemos y lo que estemos haciendo, Pam, ¿qué es lo que buscas tú cuando vas a algún, estás buscando algo? Ya sea consumir un servicio, un salón de belleza, un concierto, un espectáculo deportivo, un restaurante. ¿Qué realmente es lo que tú estás buscando?
Mira, ya a mi edad, a mi edad ya avanzada, yo siempre estoy buscando experiencias completas, algo que me ofrezca más. Creo que también tiene que ver un poco con la competitividad que hay en el mundo, que ya cada vez hay más oferta, pero también más demanda. Entonces, tenemos muchas opciones de muchas cosas. Hablando, ahorita mencionaste cuando vas a conciertos y me gustó también la parte de los restaurantes, que por mi avanzada edad es lo que yo ya consumo, ¿no? No, no es cierto.
En el tema de los restaurantes, que a mí me encanta salir a comer, me encanta salir a desayunar, yo siempre busco lugares que sean lindos o que sean a mi gusto o que sea una experiencia visual. OK. Una experiencia, pues sí, a mí me gusta mucho esta parte del diseño, también un poquito como la psicología del diseño, qué colores me gustan, qué colores me prenden, qué colores a lo mejor o qué espacios se acomodan a esa experiencia. A lo mejor, no sé si quieres comer comida oaxaqueña, ¿no?
Comida yucateca, comida asiática. Es muy importante el entorno. Y creo que ahorita ya, por este tema de Instagram, que todo lo queremos hacer Instagramiable, que todo lo queremos hacer muy visual, es muy importante, ¿no? Como, ah, quiero ir a comer tal comida y este lugar está increíble. Ya ves que tú te metes a Instagram y te aparece una infinidad de reels donde te recomiendan la experiencia entera, ¿no? De que, ay, este pan está muy rico, pero el lugar está increíble.
Muy bien, Pam. Justamente le diste al punto de donde quería llegar. De churro al final dijiste, ay, si quieres comer comida yucateca, si quieres comer comida yucateca, tal lugar. Pero, ya ahorita, queridos escuchas, háganlo y regresen. Hubo un punto en el que Pam se enfocó en todo, menos en la comida. Dijo, me gusta mucho la parte visual, la decoración, los muebles, que esté bonito. También lo dijo al final, ¿no? Pero era, le faltó decir que sea muy Instagramiable para poderlo hacer.
Ese es el punto, Pam. Justamente la comida quedó en el último lugar. O sea, por supuesto que te gusta que comas rico. Pero eso es lo que te hicieron sentir viviendo la experiencia. Es lo que hace que tú digas qué bruto, qué padre este lugar, cómo me gusta. Y sobre todo que de boca en boca la gente quiera ir, por los mismos medios que tú dijiste, Instagram, boca en boca, lo vieron en TikTok, lo que sea, no importa.
Pero es todo lo que yo he visto que pasa ahí, yo no me puedo perder el vivir esa experiencia. Entonces, es por eso que cada vez más nos debemos, y aquí sí hablamos en plural, no importa a qué te dediques y qué es lo que hagas, te tienes que enfocar a que la audiencia realmente viva una experiencia porque ya está comprobado que hoy por hoy el servicio es el mismo. Por ejemplo, mencionaste comida yucateca. ¿Cuántos restaurantes de comida yucateca conoces? Conozco dos.
OK. Y de esos dos, sin decir nombres para que luego no anden diciendo que Pam anda quemando restaurantes o al revés, sí, o que está patrocinado. Ahora, también, estimados amigos, si alguien quiere colaborar para la causa de los niños pobres de Rock and Gold, aquí recibimos sus patrocinios abiertamente. OK. No, pero por ejemplo, dijiste dos. Sí. ¿Cuál te gusta de los dos la comida? Imagino que es la misma. Buena cocina yucateca, este mismos platillos, a lo mejor una variable de uno u otro.
¿Cuál prefieres y por qué? Mira, uno está en la Narvarte y el otro está aquí en Polanco. OK. Lo prefiero a cada uno dependiendo del mood o dependiendo de la ocasión, pero pues obviamente que si me dicen, ¿a dónde quieres ir a comer comida yucateca? Me voy a Polanco a comer comida yucateca, porque el lugar está precioso, tiene unas pinturas increíbles, la atención al cliente también es excepcional y pues la de la Narvarte es un localito muy austero, pero la verdad es que la comida está increíble.
Exactamente. A lo mejor la comida es mucho mejor en el otro, pero prefieres ir por la experiencia. Es precio. Bueno, también, evidentemente, estás pagando diferentes zonas. Para quienes estén escuchando fuera de la Ciudad de México o en otros lados, Polanco es una de las zonas más exclusivas de la ciudad en la que con el simple hecho de respirar ya vas menos 1800 o más en contra.
Entonces, por supuesto que es eso, pero justamente la parte de sí, la imagen ambiental, que es toda la estimulación de lo que tú decías, del mobiliario, la iluminación, el color aplicado al lugar y esto, pero sobre todo la experiencia. Ahorita, por ejemplo, ¿has ido a algún lugar últimamente en el que supongamos que estás festejando un cumpleaños y no te den bengalitas o velas de estas que se prenden así a toda la mesa? No. Para que veas, ya la dudaste. ¿No? Ya la dudaste. Sí. ¿Qué pasó?
Que esos son de los props que empezaron a dar para diferenciar, pero que a la hora que el de junto se da cuenta que lo hacen, el de junto se da cuenta que lo hacen, el de junto se da cuenta que lo hacen, ya todos los restaurantes, todos los restaurantes, salen con la payasada de las bengalas para toda la mesa, para festejar el cumpleaños y que todos estemos ahí tomándonos fotos y posteando en Instagram las velitas y el festejo del cumpleaños.
Entonces, también esa parte repetitiva hace que sea ya normal, ya no te llama la atención esa cuestión que antes era un diferencial y evidentemente tienen que ir evolucionando. Claro. Pero realmente en general lo que logran es que tú vivas la experiencia. Pero vamos a ver, por ejemplo, en el caso de los conciertos. ¿Realmente a qué vas a un concierto? Pues lo repetimos. ¿Realmente tú vas a ver a tu artista favorito escuchar tu música? Ahí está, ahí, paremos. Ahí está. ¿A qué vas a un concierto?
A ver a un artista y a escuchar sus canciones. Para efectos prácticos, ¿qué tendríamos que estar viendo en un escenario? Pues al mono o a la mona. Al mono, a la mona o a los monos, si es un grupo, que sí tenga una buena calidad de sonido para poderlos escuchar. Músicos. ¿Y por qué nadie lo hace? Es que, es lo que te digo, siento que también ya nos estamos volviendo cada vez más exigentes, ¿no? Necesitamos más estímulos, necesitamos más y nos lo están ofreciendo. ¿Tú crees que sea por eso?
O sea, ¿necesitamos nosotros más estímulos? No, son necesidades ficticias que uno se crea. OK. Pero sí creo que... En un estado consciente, evidentemente. Sí, por ejemplo, yo he estado escuchando ahora que Luis Miguel está en gira en Sudamérica. Lo han criticado mucho. Luis Miguel siempre ha sido muy criticado porque dicen que su show carece de eso, ¿no? Y más ahorita que el Tierra haya tres, que son tres Luis Migueles los que cantan ahora. Ahora resulta que son tres Luis Migueles.
Sí, dicen que carece mucho de eso, ¿no? Como que no hay tanta producción, no hay tantas luces, no hay tantos bailarines. Y dicen la gente, no, pues es que nada más lo escuchas al cantar. Pues, ¿qué más quieres, no? Exacto. Entonces, versus a otros cantantes que tú los ves, no sé, unas Black Pink, estas bandas asiáticas que traen unas producciones, colores, que traen visuales increíbles, Coldplay ahí no está mucho ver a Coldplay en vivo porque trae unos visuales impresionantes.
O sea, parece que estás metido como en un viaje astral. Sí, fíjate que yo lo veo como dos cosas diferentes, fan. Yo lo veo como dos cosas distintas. Porque por un lado, mencionaste Coldplay, ¿no? Uno de los mejores shows que hay. ¿Por qué? Porque musicalmente son muy buenos y visualmente y toda la experiencia que te hacen vivir, regresando a la importancia de vivir la experiencia, es impresionante.
Pero también mencionaste a estos grupos del K-Pop o algunos otros por ahí, este, no porque sean a fuerza del género, ¿no? Pero la gran mayoría poperos, de repente las malas lenguas, no nosotros, que quede claro, las malas lenguas, dicen que tanto visual, tanto show, tanta producción es justamente para tratar de distraer la atención o contrarrestar la carencia de talento musical o vocal, dependiéndose del caso. Totalmente, de acuerdo. Por eso te digo que yo lo veo en dos sentidos, ¿no?
Claro que creo que existe la parte de tratar de tapar la carencia de algún talento, o no es más, no carencia, vamos a llamarle debilidad en alguno de los talentos, ya sea coreográfico, vocal, musical, ¿no? Por medio de los visuales. Pero también el otro por un complemento, fíjate, hay una anécdota que no sé si conozcas, la de los Beatles en su primer concierto en el estadio. No, a ver, cuéntamela.
Bueno, la primera vez que los Beatles se presentan en un estadio, lo hacen en un estadio de béisbol, ¿ok?
Y como no había, en ese entonces, o no estábamos, bueno, estábamos, como si hubieran nacido en esa época y hubiera ido, como no se estaban acostumbrados a los conciertos masivos, pues lo fácil fue que como las únicas gradas que había eran las gradas del estadio, y la forma más fácil de poner un escenario era al centro de ese estadio de béisbol, y evidentemente, siendo los Beatles, pues esa cosa fue un caos, fue una locura.
Uno eran, en su gran mayoría, fanáticas, histéricas, gritonas, este, emocionadas de estar viendo a los Beatles allí enfrente, y por otro lado eran los Beatles tratando de satisfacer musicalmente a la audiencia que los había ido a ver.
Bueno, hay ahí anécdotas contadas por todos, pero principalmente hay una de Paul McCartney en la que dice que ellos no oían absolutamente nada, y que estaban seguros que, porque también aquí, remontense, todos ustedes, tú también Pam, todos los que nos están escuchando, remontense a la, o imagínense la calidad de audio que había en esa época. Claro.
O sea, ahorita estamos acostumbrados a repetidoras, conciertos masivos de quién sabe cuántos kilómetros de extensión, y que todo el mundo oye perfectamente bien, pero seguramente, o no, el PA de esos tiempos, de esa época, pues estaba muy limitado.
Entonces Paul McCartney dice que ellos no oían nada, que estaban seguros que la gente, entre tanto grito, no estaba escuchando nada, y que estuvieron a punto, si no es que lo hicieron, porque lo de a entender, que desconectaron los instrumentos y siguieron, y que ellos sabían perfectamente bien que lo que la gente estaba viviendo en ese momento, sí, fue una experiencia muy limitada, muy de ese momento, pero no conectó con la audiencia,
porque estaban muy lejos, la gente no los podía ver de cerca, o sea, siguieron siendo lejanos, como siempre fueron los Beatles, no escuchaban nada, y la experiencia nada más fue ir a ver a cuatro personas, sí, ídolos, pero muy lejos y hasta allá.
Entonces, con esto ya me regreso un poquito a lo cómo ha ido evolucionando los conciertos, para convertirse en una experiencia que lo que busque el grupo, o lo que deberían de buscar los grupos más allá de lo musical, es que cuando tú vayas, realmente digas qué bruto, qué padre está, estuvo buenísimo el concierto, porque pasó, porque conecté, mira, ahí estaba justo que estábamos diciendo esto de conectar, ¿has ido alguna vez a un concierto y que el artista te vea?
No, me han subido al escenario. Ah, bueno, entonces no, ahí sí ya, ahí sí ya, ahí sí ya, ahí sí ya, ahí sí ya. Es otro tipo de experiencia y ahí sí ya fue directa, pero si estás en un lugar lejano, vamos a ponerlo, estás no tan cerca del escenario, o no estamos tan guapos o guapas como lo está Pam y tenemos la suerte de que nos suban al escenario, pero a cualquier persona que tú le preguntes, ¿has ido a un concierto y te ha visto el artista?,
la respuesta va a ser que sí. Y todos hemos sentido en algún momento que el artista nos está viendo. Este es uno de los puntos, este es uno de los puntos de los que han echado mano los artistas para romper con esa distancia. ¿Por qué? Porque volvemos a lo mismo, ¿no? Teóricamente, lo primero que lo que pasa a un concierto es a ver un artista, pero ir a ver a alguien en un escenario lejos que tiene focos y reflectores en la cara,
a alguien no le permite que vea para acá. Nosotros en un lugar nada más estar viendo, escuchando las canciones, pues ¿pa qué gastaste el en eso? Pon su disco, prende tu Spotify y pon su playlist, prende su video en YouTube y ya lo viste y ya. Pero a la hora que empezamos con esto de vivir experiencias, fíjate cómo cada vez más, y aquí estoy entrecomillando por casualidad, los artistas cada vez se bajan más del escenario. Claro.
Cada vez los escenarios tienen pasarelas, se acercan a saludar a la gente, prenden luces para poder ver a la audiencia, o sea, ya muchos prenden luces para poder ver a la audiencia, y casualmente, repito y sigo entrecomillando, hacen cantar a la gente cuando ellos prenden las luces hacia la audiencia. Cada vez tienen más, que para fines prácticos es lo mismo, columpios, plataformas, brúas, palmeras, trapecios por los que se pasean por toda la arena, por todo el estadio, por todo el auditorio,
y están más cerca de la gente. De repente se apagan las luces y aparecen en medio de la consola, y de ahí van caminando por todo el auditorio, por toda la audiencia, y se vuelven a subir al escenario mientras le van poniendo el micrófono a la gente para platicar y demás. ¿Qué están haciendo? ¿Es así nada más porque alguien se le ocurrió? No, pues están buscando esa cercanía con su público, pero ¿tú crees que eso se deba también, ese fenómeno se está dando también por las redes sociales?
Que uno ya siente como, lo sigo, todo el tiempo lo estoy viendo, que cada vez son más cercanos, ya no son como estrellas, volvemos al ejemplo de Luis Miguel, que son muy misteriosos, que son muy herméticos, que no se sabe nada de ellos, y pues no siga a verlos de cerca ni tocarlos. No, claro, las redes sociales han servido muchísimo, de hecho aquí aprovecho para hacer un paréntesis, gente que vaya a conciertos, dejen de sacar los celulares, por favor.
O sea, van a ver un concierto, no a grabar, el día que tengan casas productoras, y el día que les paguen por grabar un concierto, ese día sáquenlo, porque aparte son videos que no van a volver a ver.
Hace poco me tocó llevar, aquí sí voy a hablar como anciano, llevar a mis hijas a un concierto de reggaeton, el cual yo no, yo evidentemente no conecto ni con el artista musicalmente, no me gusta y demás, pero fue impresionante como a la hora que se apagaron las luces, lo único que se veían eran pantallas, y todas grabando lo que iba a pasar.
Entonces, claro que las redes sociales han servido, porque además no es tanto la red social para el concierto, es la red social de la persona que está grabando, que se está tomando la foto, para enseñar, para demostrar, para sentir que fue, y que por lo tanto pertenece.
Y repito y regresamos aquí todo el cassette desde que empezamos el podcast, ahorita sí ya me vi también viejísimo usando, regresamos el cassette, pero bueno, regresamos todo, a te estoy enseñando a través de mi red social que viví la experiencia, y que tú que me estás viendo te la perdiste, para que a la hora que tú lo veas en la red social, si es que no fuiste, digas, ching, qué mala suerte, me estoy perdiendo o me perdí la experiencia de haber ido.
Los conciertos de Coldplay, el final, fueron lo más instragrammeado ahora que estuvieron en México, todo mundo que fue, evidentemente, todos subieron sus videos al final del concierto, con toda la papirotecnia está dando vueltas y demás, ahí por todo el Foro Sol, todos las subieron.
Entonces, más allá de las redes sociales, yo creo que es una necesidad del artista para conectar con el público, porque antes de que existieran las redes sociales, ya habían empezado con este tipo de acercamientos y de cosas para conectar. Y ahora también ya, y tú lo dijiste cuando hablamos de qué va a ser un concierto, ya cualquier artista que medio se haga llamar artista y que da conciertos y que quiere conectar, va a ser alguna de estas cosas.
Crear la cercanía física, el prender los focos o la iluminación hasta el público, es justamente tratar de generar ese contacto visual que antes no existía. Antes el artista tenía los reflectores enfrente, para nada veía la audiencia y él le daba sin cuidado cómo estuviera el auditorio. Entonces, son cosas que conectan y ante la pregunta que te dije de cuántas veces te ha visto un artista,
ese es el efecto. Tú sentiste que te vio y que hiciste contacto visual, pero también la que estaba junto a ti, la que estaba adelante, la que estaba atrás y la que estaba ocho filas atrás. Entonces, esto hace que en conjunto con la música, a la hora que... Es más, tú cuando vas al concierto que dices que te gustó o cuando vas a un concierto que te gusta, evidentemente vas buscando, por lo menos estás esperando que canten por lo menos una canción. Pues sí.
No, no, no, claro que no. A ver, me expierdicé mal. O sea, tú estás esperando una canción en especial, en particular. No, claro. Son muy raros. Exactamente. A ver si en un día nos invitan a un concierto que no toquen canciones, sería muy entretenido verlo. Pero corrijo mi postura. Vas esperando una canción en específico. ¿Por qué los artistas son tan desgraciados?
Que si ya saben que la gran mayoría van por esa canción, porque es la más famosa, con la que todo mundo conecta, la que casi, casi que los lanzó a la fama, ¿por qué son tan desgraciados si la canten al final? Si todos la queremos escuchar, que la canten al principio, ¿no? No, no, le pierdes como la emoción del concierto. Yo siento que se bajarían las pilas. Ah, no, claro. ¿Te abres con el superhit del artista? ¿Qué pasaría? La gente se va.
La gente dice, ok, o ¿sabes qué? Voy a esperarme a las cinco que me gustan, pero como estén estrenando disco, estén estrenando canción y también los va a meter, ¿sabes qué? Ya vámonos, que son las clásicas canciones en los conciertos que son las de ahorita vengo, voy al baño. Cualquiera que haya ido a conciertos, cada vez que lanzan canciones nuevas es cuando dices, ah, ahorita vengo, es momento perfecto para ir al baño.
Pero fíjate, última canción, ya te llevaron por todo un clímax de emociones, de canciones más movidas, baladas, subieron a PAMA al escenario a cantar, todas se ardieron porque no fueron las elegidas y PAMA sí, otra vez volvió a subir, ya nos va llevando por todos lados, ya conectó con todos, pero casualmente la última canción, la última canción, la más prendida, la que más prende a la gente, le pide al artista que avienten las luces al escenario, están cantando todos, en el coro empiezan,
canten todos los de la izquierda y los de la izquierda cantan, todos los de la derecha y los de la derecha cantan, todos los de arriba y los de arriba cantan. Ahora, todos juntos, con todo el auditorio prendido, todos cantando emocionadísimos, el artista en su máximo esplendor, se empieza a despedir, se limpia la cara con toallas, las avienta al público y en el momento que termina la canción, truena un cuete, el artista desaparece y ¿qué pasa? ¿Cómo se queda la audiencia?
¿Cómo se quedó Pam Mauritti? ¿Cómo se quedaron todos aquí en la grabación? Todos se quedan así, no, más que contentos, se quedan así, asombrados y lo único que alcanzas a decir es ¡wow! ¡Qué padre es tú! ¡Wow! Este grupo cantante es lo mejor que he visto en mi vida. ¿Por qué? Porque te metió o conectaste y el objetivo se cumplió. Viviste la experiencia del concierto de el que me digas.
Por eso digo que cualquiera que se haga llamar artista por muy, muy principiante que sea o muy de medio pelo, si quiere tener un buen concierto va a tener o debe de hacer cualquiera de estas cosas porque el secreto está y la conexión está en la experiencia. Claro, oye Vic, y estos conciertos ahora que se están dando cada vez después de pandemia, lo vimos que se exacerbó más, se están encareciendo muchísimo los boletos de los conciertos, pero ya es una cosa a mi parecer que es muy exagerada, ¿no?
Hay familias que están gastando, el otro día escuché de un conocido que gastó casi 100 mil pesos en llevar a su familia un concierto de Taylor Swift y contaban que la experiencia era muy padre porque hasta les daban como una cajita y él me lo dijo así, ¿no?
Taylor Swift, Taylor Swift te da una cajita con un vasito y no sé qué tanto tenía y que las pulseritas que traían las niñas y bueno, o sea, me tocó platicar con una chava de más de 40 años que estaba fascinada con el concierto y pago 25 mil pesos por un boleto y me dijo ella que fue muy barato, ¿no? Y me comentaba esto, me dijo, o sea, ¿barato para lo que yo? Sí, no, sí, lo entiendo, lo entiendo.
Yo estaba a hacer que la experiencia fue increíble, era fascinante, yo dije bueno, o sea, yo por Billions que yo considero que es una de las más grandes cantantes contemporáneas y que te hace un show que ella baila, ya estoy como New Yorkano, bailas, cantas, ella sí baila, ella sí canta, bueno, ella tiene muchos atributos, no sé, ella también toda su producción, toda la experiencia que hay ves con Billions, pues es increíble, es inigualable, yo ni por Billions pagaría esa cantidad, yo creo que
5 mil pesos pagaría mucho. Pues bueno, eso ya también. 7 mil pesos, pero bueno, a lo que voy es que sí como comenta esto la gente, como toda esa experiencia englobada. Que están dispuestos a hacerlo.
Exacto, están dispuestos a pagar todo eso y yo, o sea, yo no sé si estos precios se han disparado tanto post pandemia por el tema de que los artistas ya no generan tantas regalías como antes, que ellos generaban muchísimo dinero con los discos y ahora lo que las plataformas les dan es mucho menor a lo que ganan.
Que incluso Taylor Swift como lideriaba este grupo de artistas que en algún momento dijeron, saben qué, yo voy a sacar mis canciones de estas plataformas porque pues no estamos generando lo justo que debería de generar un cantante. Y no sé si sea también ese mismo tema que tómala en los conciertos ya, o que yo te ofrezco una experiencia muy completa, pero pues te estoy cobrando un boleto en 18 mil pesos.
Eso yo creo que también ya, yo es más, sería padre un día invitar a alguien que se dedique bien a hacer conciertos que nos pueda explicar a ciencia cierta cómo se reparte.
Pero en la pura lógica y el poco conocimiento que podemos llegar a tener, entonces es una cuestión nada más de cuánto te cuesta traer al artista, cuántos millones de dólares te cuesta toda la producción para poderlo tener y en base a eso es el número de gente que le cabe al recinto en el que lo quieras hacer, en lo que tienen que costar. Tú crees, pero cada vez la vida se va a encarecer más.
Ah no. Pues como cuesta mucho traer a fulanito, ya te voy a cobrar 80 mil pesos un boleto para irlo a ver. Claro, y además también responde a que la gente está dispuesto a pagarla. Tú ahorita dijiste, yo no estoy dispuesto a pagarla por billones aunque sea mi artista favorita, pero con Taylor Swift, que ahorita sí, hablar mal de Taylor Swift es peor que hablar de este, es peor que hablar de religión, política y fútbol al mismo tiempo.
Pero hay gente que está dispuesta y fíjate, dijiste esto de las pulseritas que regalan y demás, pero la realidad es que son la misma audiencia, la misma gente y las mismas fans de Taylor Swift las que intercambiaban las pulseritas sí lo harían, sí, lo que lo hacían. Las mitsis.
Sí, exactamente, en relación a unas canciones y demás, pero ya que dices también de pulseritas y de cosas, ya hay muchos conciertos, también hay muchos conciertos que ya a la entrada te reparten principalmente pulseras o dispositivos que se prenden de luces y que la misma gente técnica del concierto en ciertos momentos los prenden porque ya están programados en diferentes colores, diferentes formas y al final hay unos tambos para que los regreses porque no te sirve de nada.
Creo que en algunos sí te los llegan a veces a regalar para que te los quedes como souvenir, pero regresamos al punto. Están dispuestos a pagar la millonada o cantidades exorbitantes de dinero por justamente eso.
Almiro al artista y estoy dispuesto a vivir la experiencia porque si no la vivo no pertenezco a. Entonces es un cúmulo de factores que hacen que la gente esté dispuesta a llegar a esos niveles, pero el punto central es el vivir la experiencia y vivir la experiencia porque por ejemplo, y ahorita vamos a cambiar totalmente, ya hablamos de restaurantes, ya hablamos de música, vamos a los deportes.
¿Por qué en Estados Unidos la arena de basquetbol, la arena de hockey, el estadio de béisbol, el estadio de fútbol americano y ahora los estadios de fútbol soccer están llenos? ¿Porque los equipos en serio son buenísimos? No precisamente. ¿Por qué? ¿Por qué creemos que están completamente llenos? Pues también podría ser por ir a ver a las figuras. Sí. Pero a las figuras más bien por un tema de popularidad, mediáticos, de quiénes son. Pero eso es un equipo. Es un cúmulo de todo.
Hay que suponer que eso es un equipo. Pero vamos, tú te vas a cualquier ciudad de Estados Unidos, evidentemente tienen mucho más afición a los deportes, eso también, consumen todos los deportes, es el punto central, consumen todos los deportes y lo hacen. Pero si tú vas al, repito, la arena de hockey tiene afición y toda parte siempre son equipos locales.
Entonces también tenemos que partir de que existe una buena planeación de ligas, que es el tema de otro podcast y de otro tema totalmente diferente. O sea, la gran planeación de ligas profesionales de los diferentes deportes que hacen que la gente vaya. Pero tú vas a un partido sin importar y no estoy diciendo de play-offs o clásicos o lo que sea. Tú vas a cualquier partido de cualquiera de estos deportes y está yendo.
Pero además de lo que tú dices, en gran parte es también por vivir la experiencia. O sea, vas a ver un partido de básquetbol, pero resulta que sale la mascota y cotorrea con la gente. Resulta que tienen la Qiskam, entonces en ciertos momentos van enfocando a parejas para que se den un beso. Resulta que en el medio tiempo hay un concurso que si metes la canasta o si metes el gol de campo, te puedes llegar a ganar hasta un millón de dólares.
Resulta que hay porristas y resulta que hay fuegos artificiales y resulta que hay música. ¿Eso es deporte? Pues no, eso no es deportes. Pero no te veas tan lejos, ahorita que lo mencionas, yo de donde soy, de Parral, Chihuahua, tú estás poniendo equipos de Estados Unidos y otro nivel. En Parral la gente es súper béisbolera, en el norte del país la gente le gusta mucho el béisbol. Y George desde que era chiquita iba al estadio, jamás le entendía el béisbol.
Y mi papá me decía, vente conmigo vamos a vivir la experiencia para que con más rico, porque hay cosas muy padres, te vas a divertir. Y yo no me hacía para vivir la experiencia. No, pero fíjate, es lo mismo, es lo mismo. Estábamos hablando ahorita de ejemplos grandes, no porque, igual que dijimos que lo lógico no es ir a un concierto, escuchar música, si vas a un partido de béisbol es a ver un partido. No hay nada más que hacer.
Ahora, le van sumando todo esto que hacen que vivas la experiencia y no importa si es a nivel internacional, local, con un super show o local, a ti te llevaban para vivir la experiencia de cómo se este, cómo se desarrollaba el partido de béisbol en Parral. Pero igual que cuando eres chico, lo primero que te quieren llevar o lo primero que te llevan es a un estadio de fútbol.
Y yo creo que para los que nos gusta o los que hemos vivido de chicos haber ido a un estadio, la primera que entra a un estadio es algo impresionante. Claro. Entonces, todo se trata de cómo te hacen sentir, cómo lo tratan de ver. Y creo que hasta en la vida, cada quien en su propia vida, tienes que empezar a pensar en cómo puedes ir creando para ti y para los demás experiencias. Experiencias, claro.
Pero fíjate, la experiencia ya está implícita en todo, en lo que tú hagas, en cualquier actividad, ya sea de comer, deportes, de ver un espectáculo, ver un deporte, ya en todo, todo es conceptualizado para que vivas la experiencia. A mí me llama mucho la atención antes cómo los gimnasios eran tan austeros y literal eran lugares donde nada más se levantaba pesa, peso o corrían.
O sea, ahora te encuentras una infinidad de estudios, de tipos de entrenamientos donde te invitan a vivir la experiencia al correr, al remar, donde involucran elementos para que tú te sientas más motivado, para que te sientas en un ambiente, no sé lo que tú busques, en un ambiente más alegre, en un ambiente más tranquilo. Y todos estos estudios ya te invitan a vivir la experiencia más que ejercitar.
Exactamente, ¿no? Y te dan la oportunidad de que tengas hasta uno diario, tú estás dispuesto a ir a cinco, si es que vas de lunes a viernes a hacer ejercicio, a uno distinto porque tiene los diferentes moods. Pero también es esto, no lo que hablamos al principio, y yo creo que con esto podemos cerrar perfectamente bien y concluir, que servicios hay muchos, conciertos hay muchos, deportes hay muchos, taquerías, tiendas de ropa, centros comerciales, da igual, somos muchos, personas hay muchas.
Y creo que la base del éxito o un punto que puede ser diferencial es qué experiencia le haces vivir a tu audiencia y mayor rango de éxito podrás tener. Ay, mira, qué bonitos son esos. Bueno, pues quedémonos con eso, Pam, me dio muchísimo gusto estar contigo en este capítulo. Igualmente, Vic. Síganos en nuestras redes sociales, yo soy Víctor Gordoaf. Y yo soy Pamela Gravurín. También sigan al podcast Rock and Gold, suscríbanse, denle like, nos vemos en el próximo capítulo. Cuídense mucho.