Andy Spanish presenta Cuéntame, historias cortas de un estudiante viajando por España narradas por su profe de español. Te recordamos que tienes la transcripción de esta historia disponible. El día más bonito Las chicas desprenden un olor increíble. Sus vestidos de colores vibrantes se ven fantásticos. Perfectamente maquilladas, tacones altos, probablemente de camino a una ocasión especial. Sin embargo, se paran exactamente enfrente de mí.
Estoy sentado en un banco justo delante de la Basílica de Nuestra Señora de las Angustias, hablando por teléfono con otra señora igual de importante que esta última, mi madre. Le digo que en la preciosa Basílica que tengo enfrente, una boda está a punto de celebrarse. Mientras tanto, más invitados de muy diferentes edades se reúnen frente a la Basílica en la calle Carrera de la Virgen, en el centro de Granada, y nosotros terminamos nuestra conversación.
Los hombres, ceñidos en trajes azules con zapatos impolutos, fuman un cigarrillo. Las mujeres, con vestidos que hacen gala de toda la gama cromática del arcoiris y pelo perfectamente peinado, se abrazan y toman fotos con sus móviles. Un fotógrafo profesional también hace acto de presencia. Está en la calle, mirando en dirección a los coches que van llegando. Muy cerca de la escena hay un grupo de mujeres ataviadas con trajes de flamenca de un verde muy oscuro con lunares negros.
Todas ellas llevan un lazo rojo en el pelo. Me imagino que tienen un papel artístico durante el servicio eclesiástico. Puedo divisar incluso un cámara. Para la pareja nupcial, los recuerdos que perdurarán toda la vida serán capturados aquí. 27 grados. Hace sol. Ni una nube en el cielo. ¿O sí? La Basílica es un edificio hermoso. Sólo la entrada ya es una obra de arte. Columnas con capiteles sobre pies altos y muchas estatuas que cuentan una historia bíblica.
Una pequeña escalera de mármol proporciona acceso a la iglesia. No obstante, la mitad de esta entrada, en concreto el escalón superior, está habitada por un vagabundo. Está sentado con dos perritos sobre una manta al lado de unas columnas. Pelo largo y graso, barba, ropa gris y demasiado grande. Y un vasito de cartón con supongo algunas monedas. Dos mundos opuestos en una sola imagen.
En este punto de la historia, al menos la mitad de los trajes azules y los coloridos vestidos brillantes han hecho un intento de persuadir al vagabundo y sus amiguitos peludos para que pidan dinero en otra parte. Este día es para la pareja nupcial el más bonito de su vida. Todo debería ser perfecto. Y un sintecho sucio al comienzo del servicio de la iglesia no encaja. Dale 10 euros, así se va, y si no, dale 20. Este es el pensamiento que imagino que tienen muchos trajes y vestidos.
Un billete tras otro desaparece en su vasito de cartón, pero el hombre permanece firme en su lugar. Al mismo tiempo, llega un coche nuevo e impecable, con lazos en las puertas. La pareja se baja, hay besos y abrazos, y los invitados son los primeros en entrar a la basílica. Se puede oír la marcha nupcial de Mendelssohn desde fuera, justamente cuando los novios entran.
La novia con su vestido blanco de varios metros de longitud, el novio que se hace a un lado para dejar que su futura mujer pase, el vagabundo con sus perritos que se queda solo. Es el día más bonito de su vida. En la siguiente historia, volvemos al año 1985.