Hoy hablamos básico. Episodio 10. Mi familia y tu familia. Hola, querido oyente. Bienvenido a un nuevo episodio de este podcast. puedes ver la transcripción, las explicaciones de gramática, Y los ejercicios relacionados con la historia de hoy en nuestra web hoyhablamos.com barra básico Hoy tenemos una historia para hablar sobre la familia y sobre los estilos y las maneras de vestir. También practicaremos los adjetivos posesivos. ¡Comenzamos!
Teresa y Sagrario están dando un paseo por el centro de la ciudad. Van agarradas del brazo y caminan muy despacio. Se paran de vez en cuando delante de los escaparates de las tiendas de ropa. El sagrario le pregunta a su amiga. Oye, Teresa, ese que va por ahí no es tu nieto. Sí, es mi nieto Fernando. ¿A dónde va con tantas prisas? Dice Teresa abriendo y cerrando los ojos. Fernando es un muchacho alto y desgarbado. Lleva el pelo muy largo y un aro en la nariz.
calzabotas, un pantalón lleno de agujeros y una camiseta muy ceñida. Va por la acera de enfrente a paso ligero y no ve a las dos ancianas. Enseguida desaparece por una esquina. Mejor no saberlo. Vaya pintas, comenta Sagrario arrugando la nariz. ¡Ay, Sagrario, qué antigua eres! Fernando es muy joven y es músico. Hoy en día los jóvenes músicos se visten así. Sagrario no está de acuerdo con su amiga Teresa. En cuestión de ropa y de costumbres, sus opiniones suelen ser opuestas.
Pues mi nieta Lidia toca el violonchelo. Es más joven que tu nieto Fernando y se viste como una persona normal. Fernando es músico de rock y tu nieta toca música clásica, sagrario. ¿Y qué? Cada estilo de música tiene su estética particular. La de Fernando es más atrevida y estrafalaria que la de Lidia. Mientras hablan sobre este tema, Teresa y Sagrario llegan a una plaza con un jardín donde sentarse un rato a la sombra de un árbol.
Teresa, ¿y qué me dices de tu hija? Ya no es una jovencita, pero su manera de vestir llama la atención por rara y extravagante. Mi hija es escultora, ya lo sabes, es un artista, como su marido, mi yerno, que es pintor. ¿Y por qué los artistas no pueden ir vestidos decentemente? La mujer de mi hijo, mi nuera, es psicóloga y siempre lleva unos vestidos preciosos y elegantes. Lo mismo que mi hijo. Tu hijo siempre va con traje y corbata.
¿Cómo crees que visten los abogados? ¿No van a ir al juzgado en camiseta y vaquero? ¿Y por qué no? A mí me parece aburrido vestir así. Pues a mí no, Teresa. Mi primo Ángel, que vive en Monte Carlo, siempre lleva puesto un smoking. ¿Quién? ¿Ese que dices que es millonario? ¿Sí? ¡Qué aburrido vestir así todos los días! Y el hijo de mi hermano, mi sobrino Fermín, es capitán de fragata. ¡Qué gusto da verlo de uniforme! No me gustan los uniformes, sagrario, y menos los militares.
Ya es mediodía y hace mucho calor. Teresa y Sagrario abandonan la plaza en busca de una buena terraza donde refrescarse. A Teresa le gusta el vino de Ribeiro. Sagrario siempre dice que es abstemia. Por eso toma una fanta de naranja. Aunque a veces pide que le echen un chorrito de ginebra. Entonces creo que Sagrario no es muy abstemia. Al poco rato vuelven a ver a Fernando a lo lejos, esta vez acompañado de una chica. Mira, Teresa, ahí va tu nieto otra vez, dice Sagrario. Sí, y siempre con prisa.
Esa es su novia. No lo sé, sagrario. Y además no la veo bien. Fernando a veces está con una chica y otras veces está con otras chicas. ¿Dónde están mis gafas? exclama Sagrario, revolviendo en sus bolsillos. ¿Qué cotilla eres? le dice Teresa. Los muchachos desaparecen de la vista antes de que Sagrario pueda ver bien a la muchacha. Pues mi nieta sale con un ingeniero. Mi nuera está muy contenta. ¡Cuánto me alegro!
A ver si tu nieto sienta la cabeza algún día, Teresa, que la promiscuidad no es buena. Eres muy anticuada, sagrario. Yo lo que quiero es que mi nieta me dé pronto un bisnieto, que no quiero morirme sin ver a un bebé más en la familia. Teresa sonríe, suspira y apura su vino hasta el fondo. Aprecia mucho a su amiga Sagrario, aunque no comparte su manera de pensar. Llama al camarero, pide otra copa de Ribeiro y anima a Sagrario a tomar otra fanda.
Vale, pero esta vez de limón y con un poquito más de ginebra, le dice Sagrario al camarero. El sol brilla en lo alto del cielo. La temperatura de esa mañana veraniega alcanza su grado máximo. Teresa y Sagrario sacan del bolso sus abanicos para tratar de aliviarse del calor. «Eres una moderna», le dice Sagrario a Teresa. «Y tú una antigua», contesta Teresa. Ambas se miran a los ojos y se ponen a reír. Teresa y Sagrario son muy diferentes, diferentes en lo físico. Teresa es gordita y risueña.
Sagrario es delgada y tímida. Son diferentes en ideas y principios. Una es moderna, la otra es más antigua. Diferentes, en raíces familiares. pero son iguales en lo fundamental, en el cariño sincero que sienten la una por la otra. Brindemos, dice Teresa. Chin chin, réplica sagrario. Estallan en carcajadas, se ríen mucho, tal vez achispadas por las bebidas. y no se dan cuenta de que a lo lejos están sus dos nietos.
Los dos músicos, Fernando y Lidia, que pasan cogidos de la mano camino de un concierto. Y así termina esta historia. Muchas gracias por escuchar este podcast. Recuerda, puedes ver la transcripción, las explicaciones de gramática y los ejercicios